Se construyó en 1952 y fue financiada por Saltos del Nansa, conforme a un modelo constructivo que se repite en Rioseco y Pedreo. Antes de esa fecha, en este mismo lugar se recogía agua de manantial para consumo habitual, y se siguió haciendo hasta la construcción de la red de abastecimiento del pueblo.

La fuente de planta rectangular, consiste en una pileta con el frente decorado con mortero simulando un opus incertum y una placa trapezoidal de hormigón,  y rematada por un pequeño frontón semicircular con una inscripción. Realizada en piedra y mortero de cemento, dispone de un único grifo bajo el que hay una pila. Los desagües son al exterior. Se conecta con el abrevadero contiguo, un largo depósito adosado a un muro de mampostería y mortero, mediante un rebosadero.

El lavadero es una construcción de planta rectangular realizada en piedra y mortero de cemento. La pila se encuentra contenida en un muro, quedando los otros tres libres, por donde se puede realizar el acceso al lavadero. La piedra de lavar la ropa es inclinada y está estriada. Consta de un depósito único.  La cubierta es a un agua apoyándose en el muro y sobre tres pilares en el plano frente al muro. La cubierta es un conjunto de vigas y rastreles de madera donde se apoyan las tejas curvas sujetas por hileras de piedras a lo largo de toda la superficie.  El agua llega canalizada desde el abrevadero adyacente mediante un canal cerrado. El desagüe se realiza mediante un orificio en el lateral derecho. Los vecinos denominan a este lavadero “el pilu”.