Pastos
Pastos
Tierras dedicadas a la producción de plantas herbáceas que, segadas o aprovechadas a diente en pastoreo, sirven de alimento al ganado.
Se pueden distinguir distintos tipos de pastos en los que la localización, el sistema de aprovechamiento, el régimen de propiedad, e incluso el aspecto formal, se hallan estrechamente relacionados. En el valle del Nansa existe un verdadero catálogo de distintos tipos de pastos que expresan esta relación y su variedad constituye un patrimonio territorial de gran valor cultural.
- Prados: conjuntos de pequeñas parcelas abiertas o definidas por cercas de estacas y alambre, sin apenas construcciones ni árboles, que se localizan en la proximidad de los núcleos de población, son de propiedad privada y se siegan en primavera, pudiendo dar un segundo corte en otoño.
- Prados con invernales: cercados, segaderos, a cierta distancia del pueblo, y de propiedad privada. Su integración en espacios de monte revela su origen forestal y un antiguo proceso de privatización de aquellos espacios colectivos.
- Praderías: conjuntos de prados alejados de los pueblos, segaderos, y rodeados de una cerca común de piedra que expresa el antiguo carácter colectivo de las prácticas ganaderas y del uso y disfrute de estos espacios. Las praderías con invernales denotan el afianzamiento del sistema de propiedad privada y una mayor intensificación del trabajo.
- Prados concejo: son segaderos y de pastoreo, sometidos a las disposiciones de la junta vecinal y repartidos cada año en “suertes” (parcelas concedidas por sorteo) entre los vecinos.
- Monte comunal: mosaico de matorral con herbáceas que se aprovecha a diente en distintas épocas del año según la altitud, y es de disfrute colectivo.
- Puertos: pastizal de montaña que se aprovecha a diente de forma colectiva durante los meses de verano.
Elementos de interpretación:
Prados con invernales, Prados, Prado Concejo, Puertos o pastos de altura, Montes comunales, Ganado, Monte bajo