Fábrica de luz de Puente Pumar
Fábrica de luz de Puente Pumar
Capta agua del arroyo Collavín y fue molino hasta el año 1930. Después se dedicó a producir energía eléctrica para el pueblo de Puente Pumar y otros de Polaciones.
El nombre social fue Electra del Nansa. Estuvo en uso hasta la década de 1960 y vendió energía a la sociedad Saltos del Nansa, en sus primeros años. En la década de 1980 el edificio de la central fue reformado y completamente habilitado para uso residencial, aunque conserva algún mecanismo del aprovechamiento, y la infraestructura.
El agua se deriva mediante un azud de planta recta y lámina vertiente apoyado sobre un zócalo de rocas y construido en hormigón ciclópeo. Sobre la coronación quedan los restos de una estructura que probablemente sirvió para elevar el salto útil de la presa. En la margen derecha dispone de un aliviadero y de la toma, regulada mediante una compuerta de madera.
El canal tiene 90m de longitud y es de sección rectangular con cajeros formados con canto rodado y mampostería hidráulica y solera enlosada. Hacia la mitad de su recorrido existió un puente para dar servicio a un camino peonil, hoy suprimido, de modo que un camino de tierras interrumpe el trazado actual. En el tramo final se eleva ligeramente para formar la cámara de carga.
En el edificio la entrada de agua se verificaba, para la central, a un grupo hidroeléctrico compuesto por una turbina hidráulica de eje horizontal emplazada en una cámara abierta de agua, y al molino por dos saetines que llegaban a dos rodetes. Tras la remodelación se conserva parte del entramado que sustentaba la maquinara y dos ruedas metálicas para poleas, accesibles desde el antiguo cárcavo.
Las antiguas muelas están depositadas en el exterior de la casa.
También se conoce con el nombre de “Molino La Central”