Red hidrográfica del Nansa

Conjunto de ríos y arroyos que drenan la cuenca hidrográfica del Nansa

La red hidrográfica del Nansa está constituida por el conjunto de cursos que drenan superficialmente el agua de la cuenca y la conducen hacia el mar.

El colector principal, el Nansa, nace en Polaciones prácticamente a la sombra de Peña Labra. Es el resultado de la confluencia de varios arroyos y torrentes procedentes de las altas sierras que circundan el valle.

Tras un recorrido rápido y muy rectilíneo de apenas 46 km de longitud, el Nansa desemboca en el mar por la ría de Tina Menor después de recoger las aguas del Vendul, Tanea, Quivierda y otros afluentes menores.

El valle del Nansa presenta una gran diversidad morfológica ya que, dependiendo de factores geológicos, tramos anchos y luminosos se van alternando con otros muy encajados o, incluso, con estrechos desfiladeros lo que condiciona la distribución de las actividades humanas y da lugar a un rico mosaico de unidades paisajísticas.

Pese al fuerte impacto que supone la intensa utilización hidroeléctrica de los recursos hídricos, la detracción de gran parte del caudal tanto del río como de numerosos arroyos de cabecera y la presencia de cinco presas, el cauce y las riberas del Nansa presentan una gran calidad ambiental, albergan un notable bosque de ribera y han sido integrados en la red Natura 2000 de espacios protegidos con el nombre de LIC del Río Nansa.

En la actualidad el entorno inmediato del Nansa es poco frecuentado en gran parte de su recorrido a causa de su encajamiento, cuando no relativa inaccesibilidad, y como consecuencia de su utilización hidroeléctrica. Sin embargo, el río es el eje vertebrador del valle y su principal elemento identitario y constituye por sí mismo uno de sus principales elementos patrimoniales.

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  • El Nansa y su frondoso bosque de ribera junto al puente de Sarceda

  • Aspecto del Nansa poco antes de su desembocadura en Muñorrodero